-Lizzie, papá.. Edward-Los mire a todos -creo que es hora de que sepan una cosa.
Baje la vista hacia mi pequeña hija, la cual todavia era muy pequeña pero que tenia rasgos de Edward, era la copia de él, solo unos pequeños rasgos eran parecidos a mi. Pero el resto era todo de Edward. Sabia gracias a Charlie que Edward no habia visto con detenimiento a mi hija, porque si la hubiera visto rapidamente sabria que era su hija.
Se que estube mal en no decirle nada, en no mencionar en el viaje la verdad, pero él no pregunto y yo queria disfrutar unas horas de paz junto a él, si eso era ser egoista bueno yo era la más egoista del mundo.
Lo habia extrañado si, tener sus brazos alrededor mio y sus labios junto a los mios habian borrado todo rastro de tristeza por la distancia. Nunca se sabe cuanto se extraña una persona hasta cuando te separas y luego la vuelves a ver.
Se que mis fundamentos no eran los correctos, se que no tenia justificacion para mi partida, pero todo lo hacia para su bien, para que el sea feliz junto a su familia, y que no este conmigo por compromiso.
Se que una parte de mi cerebro todavia no aceptaba el hecho de que el me amara a mi y no a otra mujer, yo que soy tan simple y tan aburrida no me creia capaz de seducir a un hombre de tal altura como era Edward.
Verlo parado frente a mi, con la mirada la cual reflejaba que estaba lleno de dudas me hacia encojerme y me hacia sentir pequeña. Porque sabia que tenia la culpa, sabia que nada de esto hubiera pasado si yo no me hubiera ido aquella noche, pero lo que siempre tube presente es que el ser humano comete errores y yo era una de las que lo cometia cada dos minutos.
- Y? Hija estamos esperando- Hablo Charlie cortando todo pensamientos que estaban en mi mente.
-Primero pondremos a la niña en la cuna- Lizzie se acerco a mi y me saco a mi niña de mis brazos para depositarla en la cunita que estaba al lado de mi cama.
Aunque la necesitaba a ella para tener fuerza sabia que no me podia abusar mas de los demas para afrontar mis problemas.
-Bueno ahora habla tranquila querida.- Anuncio Lizzie.
-Bueno... Se que tendran muchas dudas con respecto a todo lo que estubo pasando ultimamente.
-Demasiadas, ¿Como es eso de que Jacob te pego Bella? ¡Porque jamas me lo dijiste! - Chillo Charlie.
-Bueno veo que empezaremos por ahi, Charlie no crees que cuando uno tiene una pareja los problemas de pareja se arreglan de a dos?. Sabia que si tu te enterabas de algo lo ibas a encarcelar, y por mas que Jacob me lastimo y se que no es escusa, pero fue por algo que yo le oculte que fue el hecho de no poder tener hijos, es que estaba tan feliz por saber que nos ibamos a casar que preferi callarlo.
-A lo cual es mentira.-Comento Charlie. Edward no hablaba ya que el sabia toda esta parte de la historia.
-Exacto, no podia, osea no habia posibilidades, el medico que me realizo el estudio me dijo que tenia una extraña infeccion que ellos no sabian que era que me imposibilitaba el 90% de posibilidades de quedar embarazada. Pero como nunca pense que ocurriria conmigo y que alguien del cielo me ilumino me dio esa posibilidad aunque era remota y esa es la razon por la cual Eva esta aqui.
- ¿De quien es hija Eva? ¿De Mike?, juro que si es de Mike lo buscare y lo traere de las orejas para que se haga cargo.- Gruño Charlie. Edward asintio apoyandolo.
- No es de Mike. - Susurre, mirandome las manos
- ¿Entonces de quien es, mi niña? - Pregunto Lizze.
Yo levante la vista y la pose en los ojos de Edward, y mantuve su mirada, vi como en su cabeza ataba todos los cabos, recordando que hace exactamente siete meses nosotros habiamos pasando una noche junto. Vi como sus ojos empezaron a brillar y como sus labios formaban una sonrisa genuina.
- Es mia- Dijo con un hilo de voz- Es mia - Repitio en el mismo tono.
Yo solo pude asentir, ya que mi voz se habia quedado guardada en algun lugar de mi garganta, las lagrimas empezaban a correr por mis mejilllas.
-Es mia. -Volvio a repetir, lo mire nuevamente y tambien tenia lagrimas en sus ojos. Corrio hacia mi y me abrazo como pudo besandome.- Gracias mi amor. - Decia entre besos, nuestros besos me sabian a sal pero jamas pense que ese sabor iba a ser tan glorioso y libertador, por fin Edward sabia que Eva mi hija era NUESTRA HIJA.
- Todo muy lindo pero Edward tienes que ponerle tu apellido a mi nieta.-Nos separamos y nos sonreimos.
-Se llamara Eva Marie ...
- Cullen- Termino Edward con una sonrisa orgullosa.
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